jueves, 12 de junio de 2014

Amry Birke

Por lo general en días como este estaría charlando con Amry. Ver llegar su guárnica a la ventana, con su pequeña mancha roja en la cabeza que la hacia parecer muy ruda, como si antes de llegar hubiera tenido una pelea, y si este fuera el caso, esta guarnica no encajaría para nada con Amry. Ella es mi mejor amiga, la persona mas pacifica del mundo y la que tiene el corazón mas grande, nunca logre entender como es que ella logra amar a tantos, sin juzgarlos. Tan delicada, ella era mi refugio después de las jornadas de sentimientos malos en mi cuerpo, eran casi diarias durante un tiempo hasta que poco a poco se volvieron menos frecuentes, y por eso, Amry era muy poco visitada por mi desde entonces. No solo era eso, si no que se mudo a la ciudad siguiente y era casi imposible dejar la Escuela Mayor para visitarla. Muchas veces la trate mal pero no de una manera física o verbal, si no que no la supe apreciar ni querer como se lo merecía, fui un tonto.
 
    La manera que usaba su dominio era tan pacifica aun cuando atacaba a alguien, era un golpe delicado pero a la ves feroz, siempre trataba de golpear de la manera menos dolorosa. Llevaba el agua de un lado a otro como un espectáculo hecho para el Castillo Central. Amry Birke, la extraño tanto. Estar solo escapando no me hace nada bien, estoy seguro que hace unos días pude ver su guarnica, vi pasar un puntito rojo el cielo. Si tuviera que elegir a alguien que me acompañara en esta tarea, la elegiría a ella, si dudarlo. La soledad arrasa con todo, ver tanta muerte pasar me convierte cada ves en uno de los contaminados, sin ser contaminado de verdad. Trato de pensar en otras cosas, ir a mi mente otra ves y estar en un mundo diferente, en un tiempo diferente, pero no puedo volver al Salón de los Espejos. Los juegos de primavera fueron muy fáciles a un lado de lo que tengo que hacer ahora, compararlos es algo tonto pero ese recuerdo me trae a mis amigos de vuelta y es lo único que tengo en la cabeza. No quiero olvidarlos, no quiero dejar que sus rostros desaparezcan. Amry estaba en un pedestal la ultima vez que la vi, usando sus palabras para animar a la gente en estos tiempo difíciles, no se si siga viva pero si lo esta, debe de estar con muchas personas, cuidándolas y protegiéndolas. Ella es no es un Humano Perfecto pero se merece que la llamen así. Pronto acabare con esto y podre volver a verla, podremos volver a charlar y jugar. Podremos comer algo. Juntos. Cuantos amigos tengo? puedo contarlos con una sola mano, y Amry es el pulgar, el dedo que mas importante.

1 comentario:

  1. No sabes lo mucho que me haces sentir peculiar con tan bellas palabras, el tiempo y la distancia no ha ido separando un poco pero párese ser que nuestra amistad es cada ves mas cercana y fuerte, ya quiero verte y decirte lo tan especial que significa tenerte como amigo, Te quiero.

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